Personas Altamente Sensibles 

14.06.2024


Durante la mayor parte de mi vida, he tenido esta constante incomodidad en mi interior. Una sensación, muy en el fondo, de no encajar. Me sentía de otro planeta, porque no entendía a las personas, y los demás no me entendían a mí. Hasta que descubrí que existía esto...

Me pregunté si tenía autismo, Síndrome de Asperger o alguna condición extraña sin nombre. Mis padres y maestros también se lo preguntaron, pero no parecía encajar en nada. 

Eso fue hasta que, con 32 años, me encontré con el libro de Elaine Aron, "El Don de la Sensibilidad". Con sólo leer la primera página, entendí que era eso lo que me había pasado, y que lo que yo sentía tenía un nombre. Y no sólo eso: que había más personas como yo. 

Las Personas Altamente Sensibles (PAS) constituimos aproximadamente el 20% de la población mundial. El concepto fue popularizado por esta autora en la década de 1990. Según Aron, la alta sensibilidad es un rasgo de personalidad innato, y no un trastorno. 



Vivimos en un mundo donde se valora mucho más la dureza y la resistencia. En este mundo, la sensibilidad es sinónimo de debilidad y problemas. Pareciera que no hay espacio para nosotros, pero tenemos muchísimo que aportar. 

Lamentablemente, las personas que no son PAS tienden a vernos desde afuera de una forma equivocada: confunden nuestra profundidad con inseguridad, nuestra incisiva percepción con exageración, nuestra intensidad con miedo, nuestro inmenso mundo interior con timidez... Pero esas etiquetas poco tienen que ver con nuestra realidad. 

Es muy importante que no nos hagamos responsables de esas críticas, ya que resulta dañino. En su lugar, debemos enorgullecernos de nuestra virtud. 

Las PAS poseemos características que nos diferencian de los demás:

  1. Procesamiento Profundo de la Información: es decir, tendemos a profundizar más sobre las experiencias y a procesar la información de manera más exhaustiva.
  2. Sensibilidad a los Estímulos: somos más conscientes de los detalles y respondemos con menor tolerancia a los estímulos del entorno, como luces brillantes, sonidos fuertes o texturas.
  3. Alta Empatía y Conexión Emocional: las PAS somos muy empáticas, solemos captar fácilmente las emociones de los demás, y conocer profundamente a las personas.
  4. Reacciones Emocionales Intensas: las experiencias, tanto positivas como negativas, nos afectan de una manera mucho más intensa.
  5. Mayor Susceptibilidad al Estrés: debido a nuestra alta sensibilidad a los estímulos y emociones, podemos sentirnos fácilmente abrumadas en entornos caóticos o bajo presión.

Estas capacidades también nos llevan a ser personas creativas, intuitivas, detallistas y que forman vínculos más significativos y profundos. 


Si es tu caso, primero que nada te recomiendo que vayas ya a leer el libro de Elaine Aron, y que investigues sobre tu condición, porque no estás solo ni sola. Somos una gran y hermosa comunidad, y debemos reconocernos y apoyarnos.

Por otro lado, te dejaré algunos consejos:

  • Dedícate tiempo a solas: es muy importante darnos espacios de soledad y de silencio, sobretodo al sentirnos abrumadas en un entorno ruidoso y hostil. Has lo posible por respetarte cuando no quieres exponerte a una situación incómoda, o salir con gente por obligación.
  • Establece límites saludables: si bien no es conveniente gritar a los cuatro vientos y a cualquier persona tu condición (ya que muchos no la entenderán y te tildarán de exagerada), es bueno aclarar que hay cosas que te estimulan demasiado y que prefieres no hacer. Si hay confianza, también puedes explicar qué significa ser PAS. 
  • Técnicas de Relajación: prácticas como la meditación, el yoga o la respiración profunda pueden ser útiles para manejar el estrés y la sobre estimulación a la que nos vemos expuestas día a día. 

Si quieres preguntarme algo puntual, escríbeme aquí.

Ser una Persona Altamente Sensible es una bendición que, cuando se comprende y se maneja adecuadamente, puede conducir a una vida rica en experiencias emocionales y conexiones profundas. Las PAS poseemos una capacidad única para percibir y apreciar el mundo con una profundidad que muchas personas no experimentan. Si reconoces y celebras tu sensibilidad, podrás vivir de manera auténtica y plena, contribuyendo al mundo de formas únicas y valiosas.


Si te identificas como una PAS, recuerda que tu sensibilidad es una fortaleza. Aprender a manejarla y abrazarla te permitirá florecer y aportar una perspectiva invaluable a quienes te rodean.